El Ministerio del Ambiente ha empezado a girar la rueda de cambio al interior del país. Lo ha hecho a través de la implementación de las jornadas regionales "Cambio climático, desarrollo regional y reducción de la pobreza" y para hacerlo no ha encontrado mejor aliada que la Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza. Se comenzó por Tumbes el miércoles y se terminó la semana en Piura."Si bien las jornadas implementadas se han enfocado en el seguimiento de la estrategia frente al cambio climático, he sugerido que se sumen además al convenio de biodiversidad y de desertificación", sostuvo el coordinador general de la II Comunicación Nacional de Cambio Climático del ministerio del Ambiente, Luis Geng Torres.
El experto manifestó que la supervisión de dichos procesos debe trabajarse de manera coordinada con las Comisiones Ambientales Regionales (CARs) .
Comentó que si bien la población no identifica claramente el concepto de cambio climático ya han identificado problemas relacionados a éste, como la destrucción de los manglares por efectos de la intrusión de agua salada, así como la destrucción de la biodiversidad de la zona, como las conchas negras.
Alejandro Laos Fernández, de la Mesa de Concertación de lucha contra la pobreza, sostuvo que su presencia se debe a la estrecha relación entre los efectos del cambio climático y la pobreza.
"Este fenómeno tiene que ver con la seguridad alimentaria, los cultivos locales, la sanidad, ya que con un aumento de temperatura se incrementan las posibilidades de enfermedades y los que están más expuestos a ellas son los pobres Es un problema que afecta el agua, la salubridad", dijo.
Comentó que las jornadas servirán para exponer estos temas y trabajar en los mecanismos de mitigación del cambio climático, especialmente en el ámbito rural.
“Sentimos que el tema no está muy presente en las agendas regionales. La gente tiene más fijado el Fenómeno del Niño, cuando los efectos del cambio climático serán mayores y permanentes en la vida de la gente. Hay todavía mucho desconocimiento”, dijo.
Geng Torres indicó que la segunda etapa de estas jornadas estará orientada al seguimiento de la Estrategia Regional de Cambio Climático, además de las de biodiversidad y desertificación, a través de una plataforma a la que se ha convocado una gran cantidad de actores.
“En la de Tumbes hay representantes de los medios de comunicación, del área de educación y de las universidades que tendrán que realizar los proyectos de adaptación a través de estudios de investigación. Esperamos que este mecanismo se replique en todas las regiones”, indicó.
Posibles peligros
En el 2001, la Comisión Nacional del Cambio Climático del Perú publicó un informe en el que advierte sobre los posibles impactos futuros del cambio climático, entre los que se mencionó la elevación de un metro del nivel del mar, lo que acarrearía "pérdidas potenciales por la inundación en las obras litorales, viviendas, clubes, plantas pesqueras e industriales" por un valor que superaría los US$ 168´250,000.00.
Cerca del 53% de la playa La Herradura en Lima quedaría inundada, se registrarían pérdidas en la maricultura y en la actividad langostinera de Tumbes. Extensos humedales de la costa desaparecerían.
Fuente: Ancash Noticias
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