El desborde popular, antes lo personificaban los sindicatos de obreros, pescadores, estudiantes, etc. Ahora aparece una nueva y vigorosa fuerza movilizadora socioeconómica. Así ocurrió en Villa El Salvador, Gamarra y Las Malvinas en Lima; El Porvenir en Trujillo.
Correo Chimbote 21 de Diciembre del 2009
Francisco Vásquez Carrillo |
CHIMBOTE | El 18 de octubre abrió un novísimo fenómeno socioeconómico, digno de análisis. Los zorros arguedianos de la década del 60, han vuelto al 2000. Recordamos cómo el loco Moncada, cargaba un madero junto a la multitud que trasladaba féretros del cementerio de los arenales del Progreso, hacia uno nuevo de La Esperanza.
A falta de tino de nuestra alcaldesa; los comerciantes, que vendieron sobre el viejo cementerio, se trasladaron en procesión hacia el pueblo joven 2 de Mayo, por el Mar Rojo de la calle Santa Rosa que los acogió como suyos. Hernando de Soto, diría: "ahora toca la formalidad". Empero resulta que no toda formalidad es buena. El formal Mercado Mayorista Tres Estrellas se ha convertido en un elefante blanco, por obviar los consensos.
El nuevo mercado 2 de Mayo, es un gigante de voluntad y territorio. Para empezar, está respetando prolongaciones de avenidas y calles; como exige por demás la urbanidad. Un manejo poco flexible, ha hecho que los comerciantes se dividan de los de La Perla; esperamos no sea su talón de aquiles.
El desborde popular, antes lo personificaban los sindicatos de obreros, pescadores, estudiantes, etc. Ahora aparece una nueva y vigorosa fuerza movilizadora socioeconómica. Así ocurrió en Villa El Salvador, Gamarra y Las Malvinas en Lima; El Porvenir en Trujillo.
Son los "nuevos proletarios" en épocas de la globalización. Ellos son los llamados a defender los intereses del pueblo y de la patria. Sus éxitos gremiales y económicos, seguro serán los éxitos colectivos. El traslado del mercado callejero de El Progreso, a uno planificado del pueblo joven 2 de Mayo, constituye un avance laboral, urbano, comercial y fortalece el espíritu emprendedor chimbotano.
Para que el traslado se justifique, es preciso algunas pautas elementales, que espero que los asesores hayan considerado: 1) Planificación armónica con el desarrollo urbano, 2) Desarrollo responsable junto y con participación de los pueblos directamente involucrados, 3) Búsqueda inmediata del cambio de uso e instalación de los servicios básicos, 4) Fomentar el fortalecimiento de capacidades, para que los comerciantes se preparen a liderar y competir con otras regiones y 5) Los dirigentes y comerciantes, deben realizar pasantías y reaprender de otras experiencias comerciales exitosas del país, como de otros mercados internacionales.
Chimbote y los ancashinos necesitan un polo de desarrollo comercial con apertura, mirando más allá de nuestras fronteras y/o murallas. Los comerciantes deben y tienen que impulsar productos con valor agregado.
No traslademos cadáveres de los 60, hacia un nuevo cementerio. Traslademos vidas emprendedoras, para atraer clientes a nivel regional, macroregional y nacional. He aquí el gran desafío.
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