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miércoles, 5 de mayo de 2010

La Seguridad De Las Lagunas De La Cordillera Blanca

             La quincena pasada como resultado del rebalse de la laguna 513, habrían habido coordinaciones para que la Región Ancash utilice en forma directa los fondos mineros para la atención de este tipo de emergencias; sin embargo se debe tener cuidado de no comprometer la tranquilidad y el desarrollo turístico del Callejón de Huaylas declarando alarmantes emergencias innecesarias.      
Por Ing. Benjamin Morales Arnao
En Enero de 1966, la Corporación Peruana del Santa, organismo de  Desarrollo de la cuenca del Santa, crea un  programa técnico cuyo objetivo central  era el de ejecutar investigaciones glaciares y obras de seguridad en las lagunas que pudiesen ofrecer  peligro a las poblaciones del callejón  de Huaylas y Conchucos, programa que se denominó “División  de Glaciología y Seguridad de Lagunas”, dotado con personal profesional multidisciplinario, equipos técnicos  y presupuesto suficientes para cumplir su misión.
Esta oficina ubicada inicialmente en Carhuás, tuvo su sede en la ciudad de Huarás, contaba con los departamentos de Estudios, Proyectos y Obras a cargo de  12 Ingenieros de diferentes especialidades; tenía un laboratorio de mecánica de suelos para uso propio y de servicios para otras entidades, maquinaria liviana y pesada para las obras, y equipos suficientes para ejecutar todo tipo de obras de seguridad como en efecto los desarrolló. 
Ejecutó entre las década de los 60, 70, 80 y 90, veintiséis obras de seguridad, desaguando las lagunas y construyendo presas de seguridad que a lo largo de varias décadas han dado tranquilidad y bases confiables  para el desarrollo del valle del Santa.
En 1972 se crea Electroperú  transfiriéndose  a este nuevo organismo, el personal, activos y pasivos de la Corporación Peruana del Santa.  Dada la importancia del Programa de Glaciología y Seguridad de Lagunas, es transferido también este programa a Electroperú  en forma especial  con el Decreto Supremo N. 003-73-EM/DGE DEL 30/01/73. Este programa  funcionó  en organismos  del sector de Energía y Minas, durante 30 años, gozando siempre de una atención prioritaria, con autonomía técnica y provisión presupuestal suficiente para el cumplimiento de sus fines.
En 1997 Electroperú  suspende la atención presupuestal y administrativa del programa de Glaciología y Seguridad de Lagunas, quedando paralizado por casi dos años, durante los cuales realizamos múltiples gestiones ante diversos organismos públicos para su reactivación.  Se logra entonces que el INRENA  acepte integrarlo a su institución en Julio del año 1,999.
Han pasado 11 años durante los cuales el INRENA y ahora el ANA, tienen bajo su administración a este importante programa. Analizando los resultados de esta gestión, consideramos que este cambio ha sido negativo para el cumplimiento de los objetivos del programa de Glaciología y Seguridad de Lagunas ya que al eliminarse  el gran objetivo sobre la seguridad de lagunas y cambiarle el nombre y fines a “Glaciología y Recursos Hídricos”, desapareció en la gestión estatal la responsabilidad de continuar ejecutando esta labor principal para   el Callejón de Huaylas y otras regiones del país.  Es decir, se dejó de ejecutar los estudios y obras  que salvaguardan y provean de seguridad a las poblaciones frente a eventos de la naturaleza como las avalanchas de hielo, crecimiento de lagunas, deslizamientos etc.  Por otra parte se redujo el personal técnico, se liquido el laboratorio de mecánica de suelos y se redujeron los ambientes de trabajo en su local propio,  incluyendo a una dependencia del Ministerio de Agricultura.
INRENA no mostró ningún interés en volver a implementar esta dependencia, por el contrario, mantuvo durante estos 11 años un reducido personal de 3 Ingenieros un técnico y 3  ó  4 administrativos como personal eventual con renovación anual de sus contratos, expuestos a prescindir de sus servicios en cualquier momento y sin reconocimiento de ningún beneficio.  Por otro lado la atención presupuestal continuó siendo mínima y sin autonomía de gestión en un programa que,  por las situaciones especiales que debe afrontar, requiere tener libertad para resolver inmediatamente esas contingencias a criterio de sus especialistas y no seguir y esperar trámites burocráticos que retardan la atención eficaz.
Por las falencias de gestión indicadas anteriormente, el Ministerio de Agricultura con el ANA que es un organismo normativo, como responsables del cumplimiento de los objetivos de la actual Unidad de Glaciología y Recursos Hídricos, considero que es un sector que no tiene las condiciones apropiadas para atender el estudio y ejecución de las obras de seguridad de lagunas.
La quincena pasada como resultado del rebalse de la laguna 513, habrían habido coordinaciones para que la Región Ancash utilice en forma directa los fondos mineros para la atención de este tipo de emergencias; sin embargo se debe tener cuidado de no comprometer la tranquilidad y el desarrollo turístico del Callejón de Huaylas declarando alarmantes emergencias innecesarias.  En años pasados, realizamos muchos trabajos similares y nunca requerimos de emergencias ya que es  parte natural de este tipo de trabajos en cordilleras glaciares.  No se me ocurriría por ejemplo declarar en emergencia  a toda la costa peruana por estar atravesada de fallas que pueden ser causa de terremotos.
Los recursos mineros que se destinen para la atención urgente y necesaria de lagunas, deben estar bajo la administración  de la única entidad especializada; la Unidad de Glaciología y Recursos Hídricos, responsabilidad que deberá asumir para la ejecución de estudios y  obras tan particulares.
La responsabilidad de INRENA Y EL ANA al haber permitido la desimplementación progresiva del programa de Glaciología y Seguridad de Lagunas y no haber restituido la trascendental función de la Seguridad de Lagunas , me lleva a plantear,  la necesidad de crear una entidad responsable de la ejecución de las investigaciones glaciológicas y de seguridad de lagunas como funcionó perfectamente en el  pasado.  Debe crearse una entidad autónoma con capacidad de gestión administrativa, técnico y económica con un porcentaje de los aportes mineros,  podría ser un “Instituto  de Glaciología y Seguridad de Lagunas” que podría depender del Ministerio del Ambiente o del Ministerio de la Presidencia; dotado de una implementación semejante a la que se  tuvo durante la gestión de la Corporación Peruana del Santa, donde su conformación y calidad de gestión fue ejemplo a seguir por organismos internacionales.  Toca pues al gobierno, analizar seriamente esta propuesta y tomar las decisiones mas apropiadas.
Lima 3 de Mayo del 2010

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